28 Oct. 2014

Encuestas, proyecciones y resultados finales.

Oscar A. Bottinelli

Monte Carlo TV

Hemos insistido permanentemente [...] que nosotros rechazamos tajantemente que las encuestas sean presentadas o leídas como algo mágico, como adivinanzas o como apuestas [...] ese no es el papel nuestro. No somos ni adivinadores ni apostadores en búsqueda de fortuna con suerte, no es algo mágico, es algo terrenal, es una investigación científica, de Ciencias Sociales, con un muy alto grado de aproximación, pero límites muy fuertes en los datos, que impiden una precisión absoluta. Hace mucho que nosotros luchamos por decir: “Esto no es de precisión absoluta”. [...] En este caso lo que dimos fue una semana antes, y siempre advertimos que esto puede cambiar. Hay indefinidos, hay un número importante de dudosos, y esto puede cambiar, es importante quitarle la mística a las encuestas como algo exacto, algo preciso hasta el último decimal. Por eso nosotros en solitario, y muy cuestionados por mucha gente, presentamos rangos, un abanico, va de tanto a tanto. Dicen: “No se juegan”. No, no nos jugamos, no es un juego.

FV: Hay por allí algunos rumores de que sería necesario regular las encuestas.

OAB: Claro, primero empecemos a ver el tema este. A mi me interesaría, y esto no es abrir el paraguas, y ahora mucho menos después de la lluvia. Nosotros hemos insistido permanentemente, lo hemos hecho en Telenoche, en Telebuendía, en Uruguay Decide, en todos lados. Reconocemos que es una posición muy minoritaria en el mundo de los institutos encuestadores, que nosotros rechazamos tajantemente que las encuestas sean presentadas o leídas como algo mágico, como adivinanzas o como apuestas: “Yo apuesto a que este es el resultado”, ese no es el papel nuestro. No somos ni adivinadores ni apostadores en busca de fortuna con suerte, no es algo mágico, es algo terrenal, es una investigación científica, de Ciencias Sociales, con un muy alto grado de aproximación, pero límites muy fuertes en los datos que impiden una precisión absoluta. Hace mucho que nosotros luchamos por decir: “Esto no es de precisión absoluta”.

Nosotros advertimos siempre -estos términos los usas tú mucho también-: “Una foto del momento”, “Una película de ese momento hacia atrás o cómo se llegó a ese momento”, y luego una proyección de cómo será la votación o sería en base a esos datos en ese momento.

En este caso lo que dimos fue una semana antes, y siempre advertimos que esto puede cambiar. Hay indefinidos, hay un número importante de dudosos, y estos números pueden cambiar, es importante quitarle la mística a las encuestas como algo exacto, algo preciso hasta el último decimal. Por eso nosotros en solitario, y muy cuestionados por mucha gente, presentamos rangos, un abanico, va de tanto a tanto. Dicen: “No se juegan”. No, no nos jugamos, no es un juego. Nos parece mal un número u otro. Y para demostrar precisamente la variabilidad que existe presentamos todo esto.

También hay que ver esto, los partidos políticos hacen campañas electorales hasta el último día, movilizan gente, trazan estrategia, ¿por qué? Precisamente, porque ellos mismos consideran que los votos se pueden mover, y se mueven. Entonces nosotros por eso queremos, decir una vez más: Entiendan las encuestas como algo que no es un instrumento de precisión absoluto, no lo dijimos hoy, lo dijimos siempre, cada vez que las presentamos. Reconozco que es una posición exclusiva de Factum, acá no se involucra ninguna otra empresa encuestadora en esta posición de que no hay que presentar número único, que hay que desmitificar esto, esto no es mágico, esto está en el mundo terrenal, con márgenes de aproximación para acá y para allá.

FV: Bien, Oscar, la última encuesta de Factum fue cerrada el 19/10 y la votación fue el 26/10: ¿Qué números se presentaron y qué cambios hubo?

OAB: Bueno, vamos primero a ver el gráfico que ya hemos presentado. Esta es la Encuesta Nacional Factum de julio a octubre, principios de octubre, luego la proyección que nos daba al 19 de octubre, vemos que el Frente daba: 41%, 42%, 42%, y acá fuimos el único instituto de encuestas que detecta claramente hacia el final que el Frente Amplio está en ascenso, y que el ascenso nos daba como cifra de encuesta 44%, analizando el conjunto nos daba que se veía el ascenso, 44% - 46%, tanto es así que pusimos como piso del Frente lo mismo que daba la encuesta, no como promedio ni como techo, como piso.

En cambio el Partido Nacional, si se observa, nos daba 32%, y cuando presentamos el rango presentamos más abajo, 31% a 33%, porque estábamos viendo una debilidad del Partido Nacional que nos daba a pensar que probablemente podía llegar a 31%, que es lo que obtuvo.

Y Partido Colorado más acentuado, la encuesta nos daba 15%, venía sostenido en 15%, y nosotros dijimos: “Esto va a estar 14% a 16%”, veíamos que el Partido Colorado venía en caída y podía dar 14%. Y dio 13%, la caída fue mayor. Recordemos de paso que siempre manejamos un margen de error del 2% al 3%, la última fue el 2%, todavía las caídas y las subidas en relación al resultado final están dentro del margen de error de las encuestas. Son cosas que hay que atender cuando se analizan las encuestas.

Si se ve los rangos que presentó Factum no necesariamente los Partidos Tradicionales sumados quedaban por encima del Frente Amplio, la suma de los dos mínimos de los Partidos Tradicionales -que era una posibilidad real y se dio- y el máximo del Frente Amplio -que era una posibilidad real y se excedió-. Pero solo tomando el máximo, ya daba al Frente Amplio por encima de los Partidos Tradicionales. Esto son lecturas de lo que ya hemos presentado antes, acá no agregamos ningún dato.


FV: Acá no hay nada modificado, esto fue tal cual lo que se dijo.

OAB: Exacto, pero además vamos a agregar el otro gráfico, que es el siguiente. Antes de la elección, el miércoles, dijimos: “Bueno, el Partido Nacional que está dando un 32% en la encuesta”, y que nosotros dijimos: “Probablemente el piso sea un 31%”, está teniendo 8% de dudosos. Notoriamente perdió 1% de los dudosos. Y el Partido Colorado, que daba 15% la encuesta, y nosotros dijimos: “En 14% puede estar”, tenía 4% de dudosos, bajó de 15% a 13%, perdió 2% de dudosos.


Es decir, esto también hay que ver que los dudosos se pueden afirmar, uno puede ganar los dudosos del otro y uno puede perder los dudosos propios, estos movimientos también estaban dentro de lo previsible, repito, datos que presentamos el miércoles y el jueves antes de la elección. Lo que hacemos es que se lea de nuevo los datos que presentamos.

FV: ¿Por qué estos cambios, Oscar?

OAB: Acá hay un poco de re-lectura de las encuestas más observación de hechos. El Frente Amplio tuvo un gran susto, porque efectivamente estuvo con grandes probabilidades de perder la mayoría parlamentaria, repito, el hecho de que la mayoría parlamentaria queda confirmada 27 horas después de cerradas las urnas está marcando la dificultad. Y un dato, nosotros aquí y en Telebuendía dijimos: “Para la mayoría parlamentaria, no importa el porcentaje de votos del más votado, el Frente Amplio puede sacar mayoría parlamentaria con el 47% y puede perderla con el 48% y medio, y eso depende mucho de lo que pase con los partidos chicos”. Si un partido chico saca muchos votos, pega en el palo y queda afuera, eso va a ayudar a asegurar la mayoría parlamentaria del Frente Amplio, al Partido Ecologista le faltaron tres o cuatro mil votos para ganar la banca, sacó una gran cantidad de votos, no gana la banca, y esa banca se le traslada, la que no logra el Partido Ecologista, a la banca 50 del Frente Amplio.

¿Qué pasó? Que con ese susto que tuvo el Frente Amplio se observó, que muchos frenteamplistas, enojados, descreídos, cuando vieron que era de verdad que su enojo le podía producir la pérdida del gobierno al Frente Amplio, ahí se asustaron del susto, y dijeron: “No, aunque estemos mal, aunque no nos guste del todo, esto nos gusta más o nos disgusta menos que ganen los otros”, y fue y votó. Y esto es producto precisamente de la campaña electoral y de la estrategia seguida por el Frente Amplio en el último mes, y particularmente en la última semana.

FV: Oscar, para terminar. Se ha propuesto que más adelante, pasado el tiempo de elecciones, se regulen las encuestas. Hay gente que ya ha hablado de la necesidad de regular las encuestas. ¿Qué opinión tiene Factum?

OAB: Primero, esto es un tema para discutir cuando se calmen las aguas, dentro de todo un marco de reformas que hay que hacer en materia de elecciones y de regulación de campaña electoral, donde hay que regular el financiamiento de los partidos, cómo se obtienen los recursos, qué compromisos adquieren los partidos cuando se les dona dinero... y en el marco de eso hace veinte años Factum viene proponiendo la necesidad de regular las encuestas. En ese sentido tenemos una posición nítida y clara, hay que regular las encuestas ¿para qué? Para asegurar seriedad, rigor y transparencia, de parte de la realización de las encuestas, de la difusión de las encuestas, de cómo las encuestas son manejadas públicamente por los medios de comunicación y por los actores políticos, y cómo se analizan las encuestas. Que no haya filtraciones de presuntas o reales encuestas, que no se publiquen los datos según la conveniencia o inconveniencia de alguien, para perjudicar o beneficiar.

Y Europa ofrece marcos normativos de regulación de encuestas que han resultado ser serios, equilibrados, que han dado gran resultado, que tienen ya mucho tiempo de funcionamiento, y que es una muy buena base para el Uruguay empezar a discutir la regulación de encuestas, en lo cual nosotros ofrecemos todo el conocimiento que tenemos sobre la materia regulación de encuestas en Europa. Hemos hecho encuestas en Europa nosotros, precisamente, a través de lo que fue en un período una filial nuestra de Factum Italia, pero que quede claro que Factum apoya que se haga la regulación de encuestas.

FV: Para terminar, Oscar ¿es cierto que en otros países lo que paga el Estado acá lo pagan los canales de televisión?

OAB: Bueno, hay un tema que es el siguiente. Dejemos de lado las encuestas, porque esto no tiene nada que ver con encuestas, tiene que ver con proyección de escrutinio que hacemos los mismos institutos.

Lo que la noche de la elección en Uruguay, estas proyecciones de escrutinio dicen: “Debían de ser más precisas”, se hace todo a costa de privados, pago esencialmente, por lo menos las tres principales, por cada uno de los canales privados de televisión a su propio costo, un tercio de lo que pagan los canales, además, termina por distintas contribuciones yendo a las arcas del Estado. En todo el resto del mundo no solo el Estado no percibe nada por ese trabajo, sino que el gasto es totalmente del Estado, este también es un tema que hay que analizar en el marco de regulaciones, que un servicio público esencial por el cual se conoce el resultado de las elecciones, y la misma noche hubo festejos, hubo acuerdos, apoyos y definiciones, se hace en base a una actividad privada, financiada privadamente, en que el Estado no contribuye sino que además, a veces, hasta castiga económicamente.


NOTA: La propuesta es que la divulgación rápida de datos electorales la noche de la elección es un servicio público para cubrir una necesidad y una demanda de la población. Este servicio debe ser financiado por el Estado. La forma de divulgación puede ser por proyección de escrutinio, por conteo rápido o por otros métodos. Y puede ser realizado por la Corte Electoral, por otros organismos públicos, por la Universidad de la República, por universidades o institutos universitarios privados, por centros académicos privados o por empresas de opinión pública. No necesariamente implica el financiamiento estatal a las empresas encuestadoras actuales.