Afganistán Y Medio Oriente

Los uruguayos ante dos conflictos internacionales

Expresan más simpatías por Bush que por Bin Laden, pero condenan por igual los bombardeos a Afganistán como los atentados en EEUU. Sobre Medio Oriente hay una posición neutral

Dos conflictos importantes acaparan hoy la atención de la humanidad, ambos diferentes aunque con algún grado de interrelación. Por un lado la guerra de Afganistán o la lucha contra Al Qaeda y por otro el viejo problema de Medio Oriente con la confrontación entre el derecho a la existencia del Estado de Israel y el derecho de los árabes palestinos a construir un estado propio e independiente.
Una forma de detectar la posición de la gente respecto a este tipo de hechos, por supuesto que no la única forma y a veces ni siquiera la principal, es verificar los grados de antipatía y simpatía por los protagonistas principales. En definitiva todo hecho político o social tiende a asociarse con algún liderazgo, con alguna cara y algún nombre. Para ello se buscó que los uruguayos expresasen su simpatía y antipatía entre dos parejas, cada una de ellas cabeza de uno de los conflictos. Por un lado entre el presidente estadounidense George W. Bush y el líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden, y por otro entre el primer ministro israelí Ariel Sharon y el líder palestino Yasser Arafat. El relevamiento de opiniones fue realizado antes de la fulminante ofensiva de la Alianza del Norte y de que el régimen talibán perdiese la capital, Kabul.

Sobre los hechos de fondo, sobre los atentados a las torres gemelas y los bombardeos a Afganistán, el 55% de los uruguayos se pronunció contrario a ambos hechos por igual; en el país domina pues una postura que se puede determinar como pacifista. Un 15% consideró que Afganistán se merece los bombardeos, otro 15% estima que Estados Unidos se mereció los atentados y el 15% restante no emite una opinión contundente (ver El Observador del domingo 11).

Esa postura de equilibrio entre las partes cambia sustancialmente a la hora de personalizar la contienda: George W. Bush logra cuatro veces y media más simpatía que Osama Bin Laden. De cada 20 personas, nueve expresan simpatía por el presidente de Estados Unidos, dos por el líder islámico y nueve no se definen. Como se ve, lo que predomina es o una simpatía por Bush o la neutralidad, posiciones ambas que obtienen más o menos en los mismos porcentajes. De los simpatizantes de Bush, cinco expresan antipatía por Bin Laden y uno no expresa antipatía alguna. Y de los simpatizantes de Bin Laden, nueve expresan además antipatía por Bush y uno no expresa antipatía. Entre los frenteamplistas la simpatía por Bush es baja y por Bin Laden es alta (26% y 17% respectivamente), mientras que en colorados y blancos Bush obtiene entre el 62% y el 70%, y Bin Laden el 5% y el 2%, respectivamente. Es interesante, pues, el resumen de la postura de los uruguayos: predomina en forma absoluta la condena a ambos hechos violentos (los atentados a las torres y los bombardeos a Afganistán), pero luego las opiniones se dividen por igual entre una simpatía por Bush y ninguna simpatía hacia ninguno de los protagonistas; Bin Laden logra una adhesión fuertemente minoritaria, concentrada entre los frenteamplistas.


Medio oriente. En relación al conflicto en Medio Oriente las posiciones son más parejas y predomina en forma absoluta una actitud neutral de los uruguayos, como que los dos tercios no expresan ni simpatía ni antipatía por ninguno de los protagonistas, ni por el premier Sharon ni por Arafat. Y entre Sharon y Arafat hay una muy leve diferencia a favor del premier israelí. Cuando se generaliza el tema y se indaga las simpatías por israelíes y palestinos, el 73% se mantiene neutral y hay apenas un punto de diferencia a favor de los israelíes. Esto es un cambio importante respecto a cinco años atrás, cuando el 19% se manifestaba por Israel y el 10% por los palestinos, lo cual marca un descenso en el apoyo a Israel y un ascenso en el apoyo a los palestinos. Israel pasa de duplicar las preferencias sobre sus antagonistas a un casi empate, lo cual sin duda significa un importante retroceso de imagen entre los uruguayos. Entre los frenteamplistas predomina la simpatía por Arafat (24 a 15) mientras entre los colorados (19 a 13) y más aún en los blancos (27 a 7) prevalece la simpatía por Sharon.