Religión
y política
Informe
de Factum Opinión
Pública
Con analizar la actitud religiosa de
los uruguayos parece un tema apropiado en
una semana como la presente, que presenta
diversas características para los
uruguayos: para unos es una semana de
descanso, para otros una semana religiosa,
en general para todos un corte en la
actividad o en la intensidad de la
actividad y un tiempo apto para la
reflexión. El martes analizamos
cuál es la actitud religiosa de los
uruguayos y las diferencias entre
Montevideo y el interior. Hoy vemos la
relación entre religión y
política.
La actitud religiosa de los
uruguayos así como la
inclinación partidaria y el
interés en política son
temas que Factum Opinión
Pública explora semana a semana
desde hace siete años. Los datos y
conclusiones de hoy corresponden a una
serie de encuestas del segundo semestre de
1997, realizadas en todo el país,
tanto urbano como rural, a personas de 15
años en adelante.
Los católicos son el 59% del
país, pero su peso es muy diferente
en las distintas opciones
políticos. Son entre los
nacionalisats el 71%
Entre los colorados, el 68%
En el Nuevo Espacio, el 50%
En el Frente Amplio y en el Encuentro
Progresista, el 48%
Y entre las personas sin definición
partidaria, el 44%
A su vez, los no creyentes son:
En el Nuevo Espacio, el 32%
En el Frente Amplio y en el Encuentro
Progresista, el 27%
Entre las personas sin definición
partidaria, el 25%
Y entre blancos y colorados, el 12 y 11
por ciento, respectivamente
Es muy claro que el nivel de
religiosidad es más alto en ambos
partidos tradicionales, sin que aparezcan
diferencias significativas entre ellos. A
su vez, el ateísmo o el
agnosticismo, y la no pertenencia a
ninguna religión, son fuertes en
los partidos de izquierda o
centro-izquierda, así como entre
las personas sin definición
partidaria.
Otro dato interesante es la
relación entre religión e
interés en política.
Los no creyentes representan el 23% del
total de personas interesadas en
política
Son a su vez el 22% de quienes tienen
más o menos interés en
política.
Y constituyen sólo el 14% del grupo
de personas que no se interesa por la
política.
En sentido contrario, es más alta
la participación de
católicos entre la gente sin
interés en política, que
entre los interesados en política.
De las cifras que hemos presentado,
aparece con bastante claridad algunas
conclusiones:
Uno. En materia política aparece
una línea divisoria bastante
nítida, de un lado de la cual
aparecen los partidos Colorado y Nacional,
y del otro lado de la línea los
partidos Frente Amplio y Nuevo Espacio, y
el conjunto de personas que tienen en
común el no inclinarse por
ningún partido.
Dos. Entre los inclinados por los
partidos tradicionales hay mayor
proporción de católicos,
mayor proporción de personas de
alta religiosidad, menor
participación de no creyentes y
también menor participación
de personas sin religión
Tres. Entre los inclinados por los
partidos no tradicionales y las personas
sin definición partidaria, es
más alta la proporción de no
creyentes y de gente sin religión.
Y disminuye la particiación de
católicos y de personas
religiosas.
Cuatro. En general es un
pocomás fuerte el interés en
política entre las personas sin
religión que entre las personas que
adhieren a una religión. Y en
general es mayor el desinterés en
política entre las personas muy
religiosas
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