OSCAR BOTTINELLI:
Esta es la cuarta encuesta semanal consecutiva de intención de voto para el plebiscito constitucional del 8 de diciembre

La muestra es representativa de todas las personas en condiciones de votar en el plebiscito, de todo el país, tanto urbano como rural. Es decir, es una muestra representativa del 100% del electorado nacional, sobre el estado de situación al 10 de noviembre.

La pregunta que se formuló a los encuestados fue: "Habrá un plebiscito constitucional el 8 de diciembre. ¿Usted votaría a favor o en contra de la reforma constitucional?"

Las respuestas fueron:

- SI seguro, el 24.8%

- SI probable, el 2.8%

- NO probable, el 5.9%

- NO seguro, el 16.6%

- Indecisos, el 33.0%

- Sin opinión, el 7.0%


Los datos acumulados dan los siguientes resultados:

- Proclives al SI (votantes seguros más votantes probables): 37.6%, tres décimas porcentuales más que la semana pasada.

- Proclives al NO (votantes seguros más votantes probables): 22.4%, una décima menos que la semana anterior.

- Indefinidos (indecisos y personas sin opinión sobre el tema): 40.0%, dos décimas menos que la semana anterior.

- Ventaja del SI: 15.1%, tres décimas más que la semana anterior.



Las cifras aparentan una gran inmovilidad del electorado, que en una semana se movió tan sólo tres décimas de punto porcentual, o lo que es lo mismo, se movió un tres por mil. En términos de votos, el desplazamiento habido en los siete días fue de alrededor de nada más 6 000 personas.

Sin embargo, esta aparente inmovilidad es producto de dos movimientos en sentido opuesto: un leve fortalecimiento del NO en Montevideo y un paralelo crecimiento de la ventaja del SI en el interior. Ambos movimientos son leves, pero significativos.


En el departamento de Montevideo, la intención de voto por SI en la última semana cayó algo más de 2.3%, mientras que la intención de voto por NO también aumentó otros 2.3%, lo que en total achica la ventaja del SI en 4.6%.

En la capital el SI arranca con una cómoda ventaja de 14 puntos, que se mantiene dos fines de semana consecutivos, hasta el 27 de octubre. A la semana, el 3 de noviembre, esos 14 puntos bajan a 10. Y una semana más tarde, el domingo pasado, la ventaja se reduce a seis puntos.
Como se ve, la ventaja del SI en la capital siguió la siguiente curva: 14 puntos, 10 puntos, 6 puntos. Es una clara línea de achicamiento de la diferencia.
Lo significativo es que el porcentaje de indefinidos no varía sensiblemente: fue del 41% en las dos primeras semanas, y hoy se sitúa en el 39%. casi lo mismo, apenas 2% menos.

En el interior, en cambio, el SI logra una ventaja de 22 puntos porcentuales, que son tres más que la semana anterior.


Al interior de los partidos, el panorama puede resumirse de esta manera:

Entre los votantes colorados, el SI aventaja claramente al NO en 55 puntos.

Entre los votantes nacionalistas, hay una estable ventaja del SI cómoda, pero sensiblemente menor a la que se registra entre los colorados (36 puntos).

Entre los votantes nuevoespacistas, la ventaja del SI es de 34 puntos; al comienzo de la campaña electoral fue de 48 puntos. La caída de la ventaja del SI en el Nuevo Espacio es paralela al crecimiento del NO entre los frenteamplistas, lo que hace suponer una influencia del electorado frenteamplista sobre una parte del electorado del Nuevo Espacio.

Entre los votantes frenteamplistas, se incrementa la ventaja del NO, por el doble fenómeno de aumento de la intención de voto por NO y reducción de la intención de voto por SI. La ventaja del NO sobre el SI, entre el electorado frenteamplista, es de 34 puntos porcentuales

Entre las personas sin inclinación partidaria, hay una ventaja del SI en fuerte disminución. Al comienzo de la campaña electoral, la ventaja del SI fue de 20 puntos porcentuales; hoy se sitúa en nueve puntos.


El panorama, aparentemente inmóvil, registra sutiles pero significativos cambios. En principio se observa:

1) Una tendencia a la partidización del voto.

2) En el Frente Amplio, la irrupción de Tabaré Vázquez en la campaña electoral ha generado mensajes muy nítidos de alineamiento de la fuerza politica detrás del NO, que ha afectado el posicionamiento de los sectores proclives al SI.

3) Esta partidización genera paralelamente una acentuación de comportamientos diferenciados entre Montevideo y el interior. Mientras en el interior la ventaja del SI es considerable, casi difícil de alcanzar, en Montevideo el panorama es de muy alta competitividad, con una tendencia al muy rápido emparejamiento de posiciones.