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¿Culpable
o inocente?
Los casos policiales, las
situaciones que desembocan en la
intervención policial o en la
actuación de la justicia penal, son
parte importante de las inquietudes de la
gente. Algunos estudios realizados sobre
el interés de los televidentes,
oyentes o lectores concluyen en que la
información política, la
noticia policial y la cobertura deportiva
son las tres áreas de mayor
audiencia o de mayor lectura. Y una somera
medición del tiempo destinado en
los informativos televisivos o radiales, o
el centimetraje de la prensa, confirman la
importancia de dichas
áreas.
Sin duda, esta importancia en la
difusión y recepción de
información policial-judicial,
deportiva o política, tiene su
contrapartida: la toma de posición
de la gente frente a los hechos
informados. Ahora bien, aunque la
información policial-judicial es de
amplio destaque, no hay estudios que
recojan qué piensa la gente sobre
los casos expuestos.
Es sabido que la ciudadanía
tiene una baja imagen de la Justicia
Penal: un informe de Factum en tal sentido
fue divulgado tiempo atrás en este
programa. Otros estudios serios de
opinión pública, presentan
conclusiones similares. Un primer paso
para analizar esa falta de sintonía
entre opinión pública y
justicia penal es empezar por algo muy
simple: tomar los casos más
relevantes y polémicos, los de
mayor destaque periodístico y
posiblemente de mayor controversia
pública, y registrar la
opinión de la gente sobre cada uno
de ellos.
Como complemento del informe, es
interesante presentar el grado de
sintonía de la gente con los fallos
de la Justicia Penal. Aunque es necesario
aclarar que la falta de sintonía
puede obedecer a varias causas:
una puede ser la forma sesgada o
insuficiente en que los hechos se
presentan a la opinión
pública, que la lleva a tomar
posturas sin suficiente
conocimiento;
otra, la discordancia entre un
juicio emitido por el simple sentido
común y las complejidades de la
elaboración jurídica
una tercera causa puede ser la
existencia de insuficiencias de
funcionamiento de la justicia penal o de
criterios judiciales no compartidos por la
ciudadanía.
Estas preocupaciones determinaron
esta investigación de FACTUM
Opinión Pública, en una
encuesta realizada en todo el país,
tanto urbano como rural, a personas de 15
años en adelante. Se eligieron
cuatro casos polémicos, ninguno de
los cuales tiene clara connotación
política.Por dicha razón no
se ha tomado ninguno de los casos
relacionados con denuncias de
corrupción, o acusaciones de
difamación contra legisladores y
dirigentes políticos. Por otra
parte, esos temas fueron divulgados hace
unos meses, y volverán a ser
encuestados y difundidos, en este programa
en el espacio destinado a los temas
políticos y estatales.
Antes de entrar a la
investigación en sí, es
necesario hacer algunas
precisiones:
Una. Factum busca indagar la
opinión de la gente sobre temas que
son de dominio público, sin que
tome partido en ningún caso por
ninguna postura.
Dos. Tampoco se trata de promover
juicios populares, con veredictos de
culpabilidad o inocencia, sino registrar
qué conceptos se forma la
opinión pública en
función de los elementos que llegan
a su poder a través de los medios
de comunicación.
Tres. En el caso de discrepancia
entre la percepción dominante en la
opinión pública y los fallos
judiciales, no se establece causalidad. Es
decir, dicha discrepancia puede obedecer a
múltiples factores, sin que se haya
estudiado en cada caso cuál es la
causa de la discordancia.
Bien. Entrando ahora a la
investigación. La pregunta
formulada a la gente fue:
"Ahora le voy a pedir que se
transforme en Juez por un momento. Le voy
a nombrar algunas personas que han sido
acusadas de diferentes delitos y quiero
que Vd. me diga si los considera culpables
o inocentes:
Al padre Antelo, líder de la
Comunidad Jerusalén, se lo acusa de
diversos delitos.
A Carliño, un joven de 15
años, se lo acusa de haber
asesinado al simpatizante de Nacional
Daniel Tosquelas, en los alrededores del
Parque Central.
A Mónica Bertrand se la acusa
de haber matado de alrededor de 44
puñaladas a un individuo que
intentó violarla.
A víctor della Valle la
justicia italiana lo acusa de complicidad
en el tráfico de mujeres para
ejercicio de la
prostitución"
En cada uno de los cuatro, tras la
descripción del caso se
preguntó "¿Vd. cree que es
culpable o inocente?"
Veamos en cada caso cuál es
la opinión de la población y
cuál es su situación
judicial.
Al padre Antelo, líder de la
Comunidad Jerusalén
lo considera inocente el 15% de los
entrevistados
lo considera culpable el 38%
no emite juicio el 47%
En consecuencia, predomina la
percepción de culpabilidad en una
relación de cinco a dos, mientras
cerca de la mitad de la gente no emite
juicio. Actualmente, el padre Antelo se
encuentra procesado.
A Carliño, el joven hincha de
Cerro acusado de matar al simpatizante
nacionalófilo Daniel Tosquelas a la
salida del Parque Central,
lo considera inocente el 33% de los
entrevistados
lo considera culpable el 35
no emite juicio el 32%
En consecuencia, la opinión
pública se divide virtualmente en
tres tercios, es decir, hay un empate
entre quienes lo consideran culpable,
quienes lo reputan, y quienes no emiten
juicio.
A Mónica Bertrand, la artista
puntaesteña acusada de matar de
alrededor de 44 puñaladas a un
hombre que intentó violarla
la considera inocente de delito el
56%
la considera culpable el 15%
no emite juicio el 29%
En consecuencia, en la
opinión pública predomina
fuertemente una percepción de
inocencia, en una proporción de
casi cuatro a uno, mientras quienes no
emiten opinión representan algo
más de la cuarta parte de la
población.
A Víctor della Valle, el
abogado acusado por la justicia italiana
de complicidad en el tráfico de
mujeres para el ejercicio de la
prostitución
lo considera inocente el 4% de los
entrevistados
lo considera culpable el 46%
no emite juicio el 51%
En consecuencia, la opinión
pública se divide
prácticamente en dos mitades, hay
un empate entre quienes lo perciben como
culpable y quienes no emiten
opinión. Víctor della Valle
se encuentra actualmente libre de culpa y
cargo. Procesado en primera instancia por
un juez letrado de la capital, su
procesamiento fue revocado por el
correspondiente Tribunal de
Apelaciones.
Algunas conclusiones principales de
este estudio:
Primero. En todos los casos existe
un nivel importante de no opinantes, es
decir, es elevado el porcentaje de
personas que no emiten juicio. En los
casos de Mónica Bertrand y
Carliño, casos judicial-policiales
vinculados a homicidios, además uno
de ellos relacionado con intento de
violación y el otro conectado con
el espectáculo del fútbol,
el porcentaje de no opinantes es de entre
la tercera y la cuarta parte de la
población; un nivel alto pero en el
límite de los parámetros
normales. En cambio, en los casos del
padre Antelo y más aún en el
del abogado Víctor della Valle, el
nivel de personas que no emiten juicio es
extraordinariamente elevado, como que
representa la mitad de la
población.
Segundo. En cuanto a la coincidencia
entre fallo judicial y opinión
pública, las situaciones son
disímiles:
* hay coincidencia clara en un caso,
el del padre Antelo: predomina una
percepción de culpabilidad y fue
procesado.
* hay coincidencia clara con el
fallo final y discrepancia con la postura
inicial de la Justicia en otro caso, el de
Mónica Bertrand: domina fuertemente
una percepción de inocencia y fue
sobreseída en segunda instancia;
aparece una contradicción fuerte de
la opinión pública con el
procesamiento del juez de Maldonado
(procesamiento revocado en la
apelación)
* hay discrepancia fuerte entre la
propia población en el caso de
Carliño; obviamente una parte
coincide con el fallo judicial y otra no,
lo cual es inexorable desde que la
opinión pública se divide en
partes iguales.
* hay discrepancia clara con el
fallo final y coincidencia con la postura
inicial de la Justicia en el caso de
Víctor della Valle: en la
población domina una
percepción de culpabilidad mientas
que la justicia en la instancia final no
encontró méritos para el
procesamiento; en cambio, esa
opinión pública coincide con
lo actuado por el juez de primera
instancia.
Para finalizar reiteramos que FACTUM
no toma posición en ninguno de los
casos. Solamente registra la
opinión de la gente en casos que
han sido de amplia difusión
pública.
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