14 Feb. 2016

El nacimiento del frenteamplismo

Oscar A. Bottinelli1

El Observador

[…] a lo largo de 1970, Liber Seregni tuvo la firme visión de que lo que se construyese fuese ese “gran tercer partido” del Uruguay […] Entendió rapidamente que construir un nuevo gran partido supone crear una pertenencia política; y […] comprendía que la pertenencia requiere de símbolos con los cuales identificarse. Así fue que eligió a Artigas y al artiguismo […] a través de: Uno. La elección como emblema de la bandera de Otorgués. Dos, la elección de la fecha del 26 de marzo como el bautismo de masas del naciente Frente Amplio. Tres el uso constante de citas de Artigas en sus discursos y proclamas. Y cuatro, la elección de las fechas históricas nacionales para la realización de los actos públicos durante su Presidencia

El Frente Amplio se diseña entre julio y octubre de 1970, nace formalmente el 5 de abril de 1971 y tiene su bautismo de masas el 26 de marzo de ese mismo año, en el acto de lanzamiento en la Explanada Municipal de Montevideo2. Pero el frenteamplismo tardaría más o menos una década en nacer. Se gesta y alumbra en el silencio de la dictadura, en el seno de la propia gente que se comienza a denominar frenteamplista y adquiere sello oficial en el año de la transición, en 1984. Allí aparece por primera vez el concepto en el nombre de sectores políticos; los dos primeros lo fueron los efímeros Núcleos de Base Frenteamplistas Liber Seregni y Movimiento Popular Frenteamplista (MPF), este último como transformación del funcional Movimiento Blanco Popular y Progresista liderado por Francisco Rodríguez Camusso. En las elecciones del 25 de noviembre de 1984 tres grupos políticos imprimieron por primera vez sus hojas de votación con la combinación rojo, azul y blanco: la “Coalición 1001” (Partido Comunista, Fidel, MPF), la Izquierda Democrática Independiente (de la que surgirán cinco años después la Vertiente Artiguista y el MPP, entre otros) y solo en Montevideo la “Lista 99” (acuerdo del PGP con el Movimiento Socialista); en 1971 no hubo hojas de votación del Frente Amplio con el uso del tricolor. Al año siguiente, 1985, el Partido Comunista pasa a usar la definición comunicacional de “partido uruguayo, frenteamplista, comunista” y a su histórica bandera agrega una doble orla con el tricolor frenteamplista y el azul y blanco uruguayo.

Desde el proceso fundacional del Frente Amplio, a lo largo de 1970, Liber Seregni tuvo la firme visión de que lo que se construyese fuese ese “gran tercer partido” del Uruguay, que oficiase de síntesis de las mejores tradiciones nacionales en general, y de las dos tradiciones histórico partidarias, la blanca y la colorada, en particular; y a su vez oficiase de superador de esas tradiciones histórico-partidarias. Sin duda contribuyó a ese designio su origen político anclado a una corriente política tradicional (el batllismo), el conocimiento de la política tradicional y su cercanía al líder del segundo batllismo, Luis Batlle Berres. Entendió rapidamente que construir un nuevo gran partido supone crear una pertenencia política; y como hombre de la intelligentzia militar comprendía que la pertenencia requiere de símbolos con los cuales identificarse. Así fue que eligió a Artigas y al artiguismo, especialmente a la veta popular del pensamiento artiguista. Lo hizo sin duda por vocación e identificación -no en vano testó que sus cenizas fueren esparcidas en la Meseta de Artigas- pero además porque en el Uruguay pre Frente Amplio resultaba una tarea casi imposible encontrar personajes e íconos históricos que no correspondiesen con nitidez a lo blanco o a lo colorado, o fuesen patrimonio de las “corrientes de ideas” o “partidos de ideas” (como José Luis Zorrilla de San Martín o Dardo Regules en lo cívico-católico, Emilio Frugoni o José Pedro Díaz en lo socialista, Celestino Mibelli o Francisco Pintos en lo comunista). Cabe aclarar que ya desde la izquierda había comenzado un proceso de identificación con el artiguismo, con la apelación a frases del prócer en los comienzos de las 1001 en 1962 o en pensadores cercanos al Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros como Alfonso Fernández Cabrelli.

Seregni busca la identificación con Artigas y con “La Patria Vieja”, con el Ciclo Artiguista, a través de cuatro elementos: Uno. La elección como emblema del Frente Amplio de la bandera de Otorgués izada en Montevideo por primera vez el 26 de marzo de 1816, cuando la plaza fuerte pasa al dominio de la Liga Federal de los Pueblos Libres, es decir, al liderazgo de Artigas; cabe recordar que la bandera de Otorgués es una de la cerca de media docena de interpretaciones con que se diseñó la bandera tricolor de Artigas, inspirada en la Revolución Francesa. Dos, la elección de la fecha del 26 de marzo como el bautismo de masas del naciente Frente Amplio. Tres el uso constante de citas de Artigas en sus discursos y proclamas. Y cuatro, la elección de las fechas históricas nacionales (fechas patrias) para la realización de los actos públicos del Frente Amplio durante su Presidencia (1970-73 y nuevamente 1984-95). A la bandera de Otorgués se sumó, y luego se le superpuso, las letras “efe” y “a” entrelazadas, según el diseño del artista Manuel Espínola Gómez, como producto de un concurso organizado por la Comisión de Propaganda del Frente Amplio (marzo-abril de 1971). El equipo de Seregni eligió el color amarillo como fondo de las letras FA, tomados del sol de la bandera nacional.

Estaban sentadas las bases para una pertenencia, pero faltaba crear la pertenencia. Para ello debió necesitarse un elemento identificador y aglutinador en el largo silencio de la dictadura, favorecida esa búsqueda de pertenencia por el debilitamiento de las tres identidades de tipo partidario existentes al interior del Frente Amplio (y de sus colores): la comunista (roja), la socialista (verde) y la demócrata cristiano (naranja). Y allí aparece con fuerza el tricolor frenteamplista. Y nace el frenteamplismo, encarnado en la figura del general Liber Seregni, que preso una década, adquiere para su gente características míticas.


1 Secretario político de Seregni desde 1971 a 1987 y portavoz suyo en los tiempos de cárcel y proscripción; desde 1989 analista político independiente.

2 Octava nota de una serie a propósito del centenario del nacimiento de Liber Seregni. Ver Hacia los 100 años de Liber Seregni, Las 10 etapas del Seregni político, De la conducción política en el F.A , Entre la síntesis y el péndulo, FA: ¿coalición, alianza, partido o qué?, FA: ¿partido, movimiento o qué?, Dos visiones sobre el FA desde el FA,