Radio Uruguay - Puntos de Vista
Cómo estaría integrado el Parlamento con los datos de la última encuesta FACTUM, y qué incidencia podría tener esa conformación en el balotaje de noviembre.
L.C.: Repasamos los datos de la Encuesta Nacional FACTUM Agosto/Setiembre.
E.B.: Fue realizada entre el 30 de agosto y el 8 de setiembre, y es la segunda post elecciones internas.
L.C.: 39% Frente Amplio, 26% Partido Nacional, 18% Partido Colorado, 8% Cabildo Abierto, 2% Partido de la Gente, 2% Partido Independiente, 1% Unidad Popular, 1% PERI, y 1% Partido Verde Animalista. Para llegar a 100 hay un 3% de blanco, anulado, no contesta.
E.B.: En realidad llegamos a 101, porque, por efecto de los redondeos, la suma del PI, el PdlG, UP, PERI y PVA suman 6 cuando hacemos la suma lineal. Cuando lo presentamos redondeado suman 7.
L.C.: Hay un crecimiento de parte del FA, si miramos las dos últimas entregas hay estabilidad en el PN, una pequeña caída para el PC, y lo mismo para CA.
E.B.: Mirando los últimos dos meses, los movimientos están dentro del margen de error. Sin embargo, sirve para tener algunas conclusiones. Cuando miramos la línea larga, el FA cerró el año pasado en 34%. Fue el peor momento, si tomamos desde fin del año pasado hasta ahora. Hoy tiene 5 puntos más, y está cerca de llegar a lo que fue en marzo, su punto más alto de la serie, con el 40%. Se ha movido en una banda de 37% a 40%. Es una banda corta, de dos o tres puntos a lo largo de todo el período.
El PN venía oscilando entre el 29% y el 32%, a lo largo del período. Sucedió que, después de las elecciones internas, tuvo una primera baja a 26%, que es lo que tiene ahora. Aparece que tuvo una baja después de concretadas las candidaturas de cada uno de los partidos, y luego se estabilizó. Aparentemente hubo una caída que se estabilizó.
Si uno mira las líneas a lo largo de todo el período, el PN y el PC siempre suman entre 44% y 46%. Nunca superaron ese porcentaje tomados en conjunto. En el caso del PC, después de las internas produce el efecto contrario al PN. El PN tiene una caída de 4 puntos, y el PC sube 4 puntos después de las internas. Esta segunda encuesta post elecciones internas se estabilizó. Tiene una pequeña caída de un punto, no sabemos si va a continuar o no, pero claramente, entre una y otra encuesta hay estabilidad.
CA, después de un crecimiento sistemático a lo largo de tres mediciones, pasó de 6% a 7% y después a 9%, ahora baja a 8%, se estabiliza. Y luego, con el resto de los partidos, se da una estabilidad muy importante. Estamos hablando de porcentajes más bajos, por lo tanto tiende a haber variaciones menores. No podemos matizar exactamente qué está sucediendo con ellos, pero muestran una estabilidad importante. Tanto el PdlG, que después de una caída se estabilizó en el 2%, el PI tuvo una caída similar a la del PdlG, y también se estabiliza en 2%. UP, que durante un año mantuvo 2%, esta es la cuarta edición que marca 1%. Y luego aparece la consolidación del PERI en el 1%, que lo acerca a integrar el Parlamento. Y el PVA, que está marcando en el entorno del 1%.
L.C.: CA parece haber alcanzado su posición en la distribución del electorado.
E.B.: Lo que sabemos es lo que sucedió hasta ahora. Si no hay ningún cambio, y no hay motivos para suponer que esto cambie drásticamente, queda claro que los procesos de crecimiento del PC y CA se estabilizaron. Y pasa lo mismo con la caída del PN. Estamos en un momento donde hay una estabilidad interesante de los partidos, entre lo sucedido en julio/agosto y agosto/setiembre.
L.C.: ¿Cuánto puede incidir este comportamiento del PC, con Talvi hace dos semanas fuera de carrera por cuestiones de salud?
E.B.: Tiene un peso. En la propia campaña electoral ya estaba teniendo algunos problemas de posicionamiento, con el tema del debate entre Martínez y Lacalle, cuando salió duro con algunas cosas, pero salir de escena tiene un elemento, al no tener presencia mediática constante, por más que se trata de seguir con las herramientas tecnológicas que hay, no es lo mismo.
L.C.: Aclaremos que acá no hay indecisos. Ustedes terminan filtrando las opiniones y decantando en los partidos, por eso se habla de voto fuerte y débil. Redondeemos ese concepto.
E.B.: Utilizamos el concepto de Estimación de voto, que, en general, es lo que se hace en la última encuesta previa a las elecciones. En Estados Unidos y Europa se utiliza esta forma. No se presentan indecisos. Es importante marcar que el nivel de No sabe/No contesta de la pregunta base es del 5%. De esa pregunta solo queda un 5%, y usamos 20 variables más para estimar cuál sería el comportamiento del voto de esas personas. Planteamos el escenario como si efectivamente fueran las elecciones, y lo asimilamos al comportamiento que podría tener la población hoy.
L.C.: Pasemos a la integración de las Cámaras, a partir de esta distribución de adhesiones que la gente les manifiesta.
E.B.: Si proyectamos esta estimación de voto a las bancas parlamentarias, en el Senado estaría quedando el FA con 13 o 14 bancas; el PC con 6, el PN con 8 o 9, y CA con 2 bancas. Hay una en disputa entre el PN y el FA.
L.C.: Tomando en cuenta que el ganador de la elección lleva al presidente de la Asamblea General y del Senado, debemos agregar uno más, indistintamente a cualquiera de los partidos, y en ninguno de los casos se puede hablar de mayoría.
E.B.: Hoy no habría mayoría de un solo partido. Es interesante ver los movimientos cuando lo comparamos con cómo está conformado hoy el Parlamento. Hoy el FA tiene 15 senadores, y tendría uno o dos menos, con la estimación al día de hoy. El PC crecería de 4 a 6 senadores, el PN tendría un pequeño descenso, de 10 pasaría a 8 o 9, y, en lugar del PI, aparece CA, con dos senadores.
L.C.: ¿Y en la Cámara de Diputados?
E.B.: Estamos teniendo una variedad impresionante de partidos. UP aparece con un diputado consolidado, el PERI estaría en condiciones de aparecer en el Parlamento. El PVA está entre 0 y 1, tiene chance, pero menos que el PERI. El FA estaría entre 39 y 41 bancas, lejos de las 50 de hoy. Esas bancas aparecen en disputa con el PC, que tendría entre 18 y 19, el PN, que tendría 26 o 27, y el PdlG, con uno o dos. El PI aparece con dos, y CA aparece con 8 diputados. Pasamos de un Parlamento de cinco partidos a uno con hasta nueve.
Es interesante ir viendo esto porque, más allá de que, efectivamente en octubre se elige presidente y vicepresidente, se elige también Parlamento, y la definición de cómo quede el Parlamento es muy importante para lo que pueda pasar en noviembre. El resultado que se obtenga en octubre en la distribución de bancas puede tener una influencia muy grande sobre el comportamiento de noviembre.
L.C.: ¿Cuál es el razonamiento?
E.B.: Ver si las coaliciones que se han ido manejando con el paso del tiempo, con menos fuerza últimamente, pero que, en algún momento, tuvieron mucha fuerza, si esa coalición queda como un núcleo duro, y logran transmitirlo de esa forma y logran la mayoría parlamentaria en el conjunto, eso le da a la oposición un plus de cara a noviembre. No porque la gente lo piense de esa manera, sino porque se da el escenario. El FA, en 2014, logró el triunfo con una ventaja muy holgada, entre otras cosas, porque obtuvo la mayoría parlamentaria. El haber obtenido la mayoría le dio un plus de incentivo para noviembre, y Lacalle Pou quedó en una posición incómoda, habiendo perdido la mayoría, y tratando de convencer de una gobernabilidad contra una mayoría parlamentaria contraria. Hay que tener en cuenta eso.