12 Set. 2014

Las mediciones de la campaña electoral.

Oscar A. Bottinelli – Diálogo con Fernando Vilar

Radiocero y Radio Monte Carlo

[...] hay que tener en cuenta que hay un momento en que las encuestas deben ser también el propio objeto de análisis [...] el papel esencial de las encuestas es ser un instrumento que da a la propia sociedad, a la propia opinión pública, una información de qué piensa, qué valores tiene, qué actitudes, la propia opinión pública. En el caso de una campaña electoral, de las elecciones, cómo se va orientando la gente hacia el voto.

OAB: ¿Qué tal Fernando? Bienvenido de retorno al ruedo.

FV: Muchas gracias. Ya estamos de nuevo al pie.

OAB: Bueno. En primer lugar hay que tener en cuenta que hay un momento en que las encuestas deben ser también el propio objeto de análisis, y ver cuál es el papel de las encuestas. Bueno, el papel esencial de las encuestas es ser un instrumento que da a la propia sociedad, a la propia opinión pública, una información de qué piensa, qué valores tiene, qué actitudes, la propia opinión pública.

En el caso de una campaña electoral, de las elecciones, cómo se va orientando la gente hacia el voto. La gente recibe muchas informaciones, algunas están tan incorporadas que parece que son naturales. El Índice de Precios al Consumo, el costo vida, que es producto de dos encuestas, de dos tipos de encuesta. La desocupación que es producto de encuestas, el nivel de pobreza, que es producto de encuestas.

Bueno, otro tipo de encuesta es la intención de voto o la aprobación y desaprobación del gobierno. Y la finalidad es esa, dar un panorama informativo como da todo lo demás.

FV: Ahora bien, hay veces que las distintas consultoras dan escenarios similares y otros momentos que dan escenarios diferentes ¿Por qué?

OAB: Bueno, en primer lugar las encuestadoras -sobre todo en campaña electoral, pero también a lo largo de los años- las de opinión pública, recibimos aquel viejo dicho: “Palos porque bogas y palos por qué no bogas”. Cuando es diferente dicen “¿Qué pasa? Se equivocan”. 

Pero resulta que voy a contar una anécdota, en 2009 a alguien, una persona particular, se le ocurrió iniciar un juicio, una demanda contra Cifra, Equipos y Factum, porque los resultados previos a la elección de octubre habían coincidido, y además habían coincidido con el resultado electoral. Y dijeron: “Eso es una manipulación”.

También cuando se hacen las cosas perfectas, normalmente, cuando llegan las elecciones, ahora voy a explicar por qué, coinciden las principales encuestadoras. Lo insólito es que se considerara como un agravante que hubiera coincidido con el resultado electoral cuando la gente votó después. Salvo que haya fraude. Como salía en México el resultado electoral antes de que la gente votara, es imposible que uno tenga el dato de cómo va a votar la gente.

A veces se da esto pero otras veces hay escenarios diferentes, que en este momento parecía que se están dando.

FV: ¿Y por qué presentan escenarios diferentes?

OAB: Bueno. Acá viene el tema. Las encuestas a veces se cree que son un aparato. Como un termómetro, que uno pone el agua y sale la temperatura, que un aparato dice “Frente Amplio 42%, Partido Nacional 32%”. No. 

Las encuestas son todo un procedimiento, una metodología, que implica, bueno, elaborar cuestionarios, elaborar muestras, hacer las preguntas, interpretar, etc, etc, etc.

Entonces, hay diferencias entre las encuestadoras en cómo se elabora la muestra, la muestra es a dónde se va a encuestar, cómo se selecciona al encuestado. Porque uno va a una manzana determinada, a hogares determinados, eso se hace también por teléfono, entonces se llama número determinado, y de ese hogar a quién se le hacen las preguntas, las metodologías no son todas iguales.

Luego el cuestionario, cómo se redacta la pregunta. Cómo son las opciones de respuesta, puede ser lo que se llama espontánea o abierta, que se recoge nada más lo que dice la gente. A veces a la gente se le dan opciones de respuesta.

La sucesión de preguntas, porque a veces la sucesión de preguntas, si uno está distraído, puso preguntas que inciden sobre las siguientes. Y hay que evitarlo.

Luego el procesamiento, hay métodos, protocolos para procesar las encuestas. Para de todas las respuestas que dio la gente llegar a los números finales, que no es un aparato que lo hace solo. Y luego analizar los datos, interpretarlos.

Y por último está la forma de presentar los datos que a veces puede sugerir cosas, y otras veces pueden tratar de ser digamos, un poco lo más neutral posible.

FV: ¿Y hay, Oscar, distintas maneras de presentar las cosas?

OAB: Al menos en el mundo occidental, el mundo donde hay elecciones permanentes, partidos políticos, candidatos conocidos, hemos visto que hay modelos diferentes de encuestas o de encuestadoras, y en Uruguay es bastante claro que hay algunas que mes a mes presentan cambios muy fuertes, cómo si uno dijera “Hoy vemos que está soleado a raja tabla”, y a la siguiente es “Alerta naranja”.

Nosotros en general estamos conformes con nuestro procedimiento, nuestra metodología, porque cuando se dice el voto, ya lo que la gente puso en la urna, y compara elección con elección, también se ve que Uruguay no se pasa de sol radiante a alerta naranja, de una elección a otra, sino que los desplazamientos siempre son relativamente tenues, no son abruptos.

Excepcionalmente, como pasó en el 2004 con el Partido Colorado, no hay un cambio espectacular, y eso es producto de alguna situación extraordinaria también en la vida del país.

Esto es lo que en la terminología de la Ciencia Política, se dice que Uruguay es un país de “baja volatilidad electoral”.

FV: Oscar ¿Cuál es el papel de las encuestas: presentar una foto y una película o pronosticar el resultado?

OAB: Bueno, ahí hay opciones. Hay quien opta por hacer pronósticos, lo cual en general tiene más impacto. Eso no hay que dudarlo. Tiene más marketing si uno se presenta como augurando el futuro. Haciendo pronósticos, haciendo apuestas, hablando de aciertos, diciendo: “El escenario futuro va a ser tal”.

Esa es una postura, correcta, pero es un estilo. Nosotros preferimos otro mucho más acotado. Que es presentar, lo hemos hablado mucho nosotros, fotos y películas. Es decir, la foto del momento y la película que viene de atrás.

Es decir, hasta hoy es esto, después se verá cuál es la tendencia, pero no tenemos bola de cristal, no adivinamos el futuro. Lo que podemos decir si, es que hay cosas obvias, a nadie se le ocurre pensar que la Presidencia de la República la va a ganar el Partido Ecologista, por ejemplo. Pero dentro de escenarios razonables uno tiene que decir: “Hasta aquí llego”. 

Y sobre esto es muy importante remarcar, porque se ha hablado mucho. El 1º de junio algunos dijeron: “Se equivocaron las encuestas”. Nosotros tenemos otra postura y de paso, queremos repasar lo que dijimos acá, en Radio Cero y Radio Montecarlo el último día que se cerraba la campaña electoral de cara al 1º de junio.

Dijimos: “Las encuestas, mucho más en las Elecciones Internas, son meramente un panorama de cómo está la cosa. Pretender que esto sea un pronóstico de un juego de aciertos es un error, y no es que uno esté abriendo el paraguas, trata de ubicar las cosas como son. Esto no es ni un juego de azar, ni una competencia deportiva, ni jugar al oráculo, al gurú. Acá uno hace mediciones que dan determinado resultado con determinadas hipótesis imaginarias y le da un panorama a la gente. Ahora, no es prever cuál va a ser el resultado, además no es el papel de las encuestas y mucho menos cuando el voto es voluntario”.

Y además habíamos dicho: “ ... lo que define esto [referido a la elección] no es lo que diga una encuesta, lo que define esto es la capacidad de motivación que tenga para que la gente que esté con uno u otro candidato, vaya a votar el domingo, y el juego de los aparatos”

Es decir, lo que insistimos es la necesidad de que se escuche bien todo lo que se dice y no se resuma, sobre todo, en que se diga: “Hoy las cosas están así” y se traduzca en que “Factum dijo que va a ocurrir tal cosa”. Cuando uno hace prevenciones de esta fuerza, de esta magnitud, es muy importante que la gente la tenga en cuenta.

Esto lo decimos no solo respecto al 1º de junio, sino respecto al 26 de octubre, y respecto después al 30 de noviembre. Que se atienda que estamos diciendo lo que pasa en el momento, que siempre hay posibilidades de cambio, que hay que seguir las tendencias, y que esto puede impactar en los resultados.

La encuesta no es la publicación del resultado del escrutinio por anticipado de que la gente vote, no es el extracto de la Quiniela antes de hacerse el sorteo. Primero se hace el sorteo y después se publica el extracto de la Quiniela.

Primero la gente vota, después está el escrutinio y el resultado. Esto lo que dice es que antes de que la gente vote la gente está pensando esto. Es muy importante ver cual es el alcance y el límite que tienen las encuestas.