28 Ago. 2021

El referendum como certeza

Oscar A. Bottinelli

El Observador

De mantenerse la media del 9,9% de rechazos sobre el total de adhesiones verificadas, la barrera constitucional de validación del recurso se obtendría cuando se hayan verificado unas 745.500 adhesiones, vale decir, se registraría un exceso de algo más de 50.000 adhesiones, cuya verificación no sería necesaria […] para que el recurso de referéndum fuere rechazada, se requiere que a partir del día de ayer la tasa de rechazo se elevase del 9,9% al 15,8%.

De las estadísticas surge un exceso de cerca de 50 mil adhesiones.

Los actos y procedimientos electorales se caracterizan por su formalismo, es decir, por la existencia de pautas precisas, normas estrictas y definiciones concretas. No hay demasiado lugar para la discrecionalidad, excepto en la calificación de la validez o la invalidez de determinados elementos, como la impresión digital; pero aun en este caso, el margen de duda es casi irrelevante, por la calidad técnica de los papilóscopos (los especialistas en la lectura de las huellas dactilares).

Una sociedad necesita tener la mayor cantidad de certezas sobre la ocurrencia o no de actos electorales, mucho más si tienen la relevancia de un acto electoral de medio periodo. Por lo tanto, no cabe mantener incertidumbres reales o ficticias sobre si ocurrirá o no un referéndum contra la denominada Ley de Urgente Consideración, a la que se le ha puesto el apodo de LUC.

Para salir de dudas, lo mejor es recurrir a los números puros y duros. Primero, los elementos básicos:

Uno. El 8 de julio pasado se presentaron ante la Corte Electoral la cantidad de 797.750 adhesiones, las cuales fueron numeradas mediante los procedimientos habituales del organismo y con las debidas garantías de contralor político.

Dos. El total de inscriptos en el Registro Cívico Nacional en calidad de habilitados para votar ascendió a dicho día a 2.686.174 personas

Tres. La Constitución exige que para que un recurso de referéndum resulte válido, obtenga la adhesión del 25% de los habilitados, que a esa fecha es de 671.544 personas.

Al día jueves 26 transcurrieron 33 días de verificación de las adhesiones referidas, en que se comprueba la validez de la serie y número de la credencial cívica, la coincidencia del nombre y apellido, y la impresión digital.

En este lapso se han verificado en forma definitiva 209.560 adhesiones, de las cuales han resultado aceptadas 188.789 y rechazadas 20.771. En porcentajes se verificó el 27,9% de las adhesiones presentadas. De las mismas se validó el 90,1% y se rechazó el 9,9%.

El análisis de las 33 jornadas demuestra que el nivel de rechazos tuvo una oscilación de +/- 1,2% sobre la media, lo cual marca una alta estabilidad en la relación aceptaciones-rechazos. Otro dato interesante es que entre el 8% y el 12% de las adhesiones presentaron dudas en la primera verificación y fueron sometidas a una segunda instancia realizada por personal de mayor calificación y experiencia. Se observó, lo cual es un dato relevante, que el porcentaje de aceptación de las adhesiones remitidas a esa segunda instancia, estuvo en los mismos parámetros que las aceptaciones habidas en forma directa, en primera instancia. De donde, no se produce un incremento de los rechazos.

Por otra parte, el orden de numeración de las firmas ha sido relativamente aleatorio, tanto en la presentación hecha por los impulsores del recurso de referéndum, como en la distribución de los paquetes de adhesiones entre los equipos verificadores. No se ha seguido en la verificación un orden correlacionado con el cronograma de recolección de adhesiones. De donde, lo verificado hasta ahora no son las adhesiones recogidas en primer término, ni las que se van a verificar al final son las recogidas en el aluvión final. Por lo tanto, no cabe esperar razonablemente un cambio en el rango de rechazos.

De mantenerse esa media del 9,9% de rechazos sobre el total de adhesiones verificadas, la barrera constitucional de validación del recurso se obtendría cuando se hayan verificado unas 745.500 adhesiones, vale decir, se registraría un exceso de algo más de 50.000 adhesiones, cuya verificación no sería necesaria. Las adhesiones sobrantes equivalen al 6,3% del total de adhesiones presentadas y numeradas.

Al día jueves 26 restaban por verificarse 573.468 adhesiones y a su vez restaba para alcanzar la barrera la cantidad de 482.755. De donde, para que las adhesiones no alcanzasen y el recurso de referéndum fuere rechazado, se requiere que a partir del día de ayer la tasa de rechazo se elevase del 9,9% al 15,8%. Es decir, un incremento de la tasa de rechazo en un 59,6%, o dicho de otra manera, que la tasa de rechazo se multiplicase por 1,6. La probabilidad estadística de que este fenómeno ocurriese es extraordinariamente bajo.

Cabe insistir que si la tasa de aceptación continuase en el rango medio del 9,9 hasta verificarse la mitad de las adhesiones presentadas, para que el recurso corriese riesgo de validación a partir de allí la tasa de rechazo debería superar el 21% de las adhesiones verificadas y aumentar en un 115%, es decir, multiplicarse por 2,15. La probabilidad estadística de que este fenómeno ocurriese pasaría a ser excepcionalmente extraño.

Este examen de datos ha sido motivado por la aparición en redes sociales y medios de comunicación de opiniones de opinantes políticos que ponen dudas en la aceptación del recurso de referéndum, o directamente que afirman que el acto referendario no se realizará. Además, se ha sabido que algunos importantes dirigentes políticos de la Coalición Multicolor habrían hecho manifestaciones en el mismo sentido.

Dicho esto parecen algunas cosas claras: Una, que se realizará el referéndum contra la LUC. Dos, que la verificación de firmas concluirá alrededor del mes de diciembre, si no se incrementa sustancialmente el ritmo de verificación. Tres, que en tal caso el plazo constitucional para la realización del acto electoral finalizaría en el mes de abril. Cuatro, que dado que la mitad de ese mes es abarcado por la Semana de Turismo (desde el sábado 9 al lunes 18, feriado laborable), y en este país tampoco es indicado realizar el acto electoral en los meses de pleno verano, todo indica que el acto electoral podría realizarse en el mes de marzo. Quinto, que para que queden unos cuantos días disponibles para culminar las labores de la Justicia Electoral antes de Turismo, las fechas posibles son los domingos 6, 13 o 20 de marzo.